Son muchas las personas que buscan realzar, equilibrar y mejorar la apariencia de sus rostros a partir de una intervención quirúrgica de la nariz conocida con el nombre de rinoplastia.
Y esto se debe a que el rostro no es solo su mejor carta de presentación ante el mundo, sino que, a través de dicha cirugía, se puede incrementar la autoestima y el amor propio al obtener una correcta simetría entre las estructuras anatómicas de la cara y de la nariz, ya sea de vista frontal o de perfil.
Con la finalidad de que la operación llene las expectativas del paciente y se obtenga un resultado exitoso, el médico cirujano plástico tratante deberá asesorar y asistir en todo lo concerniente a dicho procedimiento en el quirófano.
No hay que olvidar que, este tipo de operaciones son de las más demandadas a nivel mundial, motivado al gran cambio que ella ofrece. Sin duda alguna, es una de las más requeridas por los resultados tan óptimos y por el embellecimiento tan radical que brinda al rostro.
Además de arrojar excelentes resultados a nivel estético, y otros de carácter psicológico, también ofrece una amplia gama de ventajas adicionales que es necesario conocer en detalle.
En los casos excepcionales de pacientes quienes acuden con un cirujano plástico para corregir traumatismos o deformidades en el rostro causadas por algún accidente, la mayoría de estos individuos asegura haber hecho la mejor elección con una rinoplastia.
Es más, para muchos, esta intervención ha sido su única opción para contrarrestar la secuela psicológica que llevaban a cuestas y con el resultado revertir su problema de nariz.
El poseer una nariz acorde a nuestro rostro y sin protuberancias puede ser algo muy relativo y limitado, ya que no todos tienen ni la suerte ni la genética necesaria.
En el caso de aquellos quienes no poseen ese perfil deseado, es probable que hayan asumido tener que lidiar eternamente con ese complejo de imperfección, entre comillas.
La rinoplastia asegura un cambio personal de 180 grados, eliminando disgustos pasados. La persona, no solo se habrá desentendido de su no tan agraciado perfil, sino también de los complejos que esto le traía en consecuencia.
La rinoplastia aumenta la confianza, aceptación y seguridad en sí mismo
Tanto pacientes como cirujanos plásticos vinculados a esta operación han podido evidenciar la mejora en la salud mental y personal tras la intervención de nariz. Han experimentado un cambio drástico en su autoaceptación, mejorado sus posibilidades laborales, sociales, e incluso, cómo no, sentimentales.
Debes saber que las narices también evolucionan con las modas o tendencias de turno, a tal punto de influir en las preferencias de los pacientes respecto a un modelo tal o cual de nariz.
Aunque parezca increíble, existen pacientes quienes, durante la evaluación con su cirujano plástico presentan referencias sobre una cirugía de nariz de otra persona, tan solo para que se le opere igual, o lo más parecido posible. Esto es un gran error. No se debe tratar de imitar la apariencia de un tercero, nunca.
Lo más recomendable en este contexto es guiar al paciente y orientarlo en todo lo referente a la cirugía, de acuerdo con su estructura anatómica, es decir, según su tipo de rostro. Esta guía es la mejor opción en función de la salud del área de la cara y de lo que se requiere corregir.