Restablecer y mejorar la apariencia externa de la nariz es la causa más común para someterse a una rinoplastia. Más del 80% de los médicos la recomiendan a sus pacientes por razones estéticas, aunque también se realiza en casos de dificultades respiratorias.
A raíz de este tipo de problemas nasales, respiratorios o estéticos, mucha gente presenta complejos que afectan a su autoestima, pero cuando esto afecta el diario vivir, es pertinente someterse a este tipo de intervenciones para lograr una mayor simetría o armonía, pero, sobre todo, una vida más tranquila y satisfecha.
Son variadas y para cada persona tienen un grado distinto de importancia:
Los pacientes quienes han sufrido algún tipo de accidente o conmoción que cambia o daña la forma de la nariz, suelen soñar con recuperar su antiguo aspecto (lo que es natural); para ello existe la rinoplastia, una operación milagrosa que repara los daños y recupera el aspecto físico y estético de la persona.
Los problemas respiratorios son muy molestos y, en algunos casos, invisibles. A largo plazo pueden generar eventos de mayor envergadura, por tanto, cada vez son más los pacientes quienes acceden a someterse a una rinoplastia y así poder solucionar de una vez por todas este tipo de inconvenientes.
La giba dorsal, conocida coloquialmente como “nariz aguileña”, es la razón más común por la cual las personas deciden operarse. Esta clase de nariz puede ser bonita de frente, pero, a los pacientes no les gusta verse de perfil, ya que el dorso de la nariz suele sobresalir desproporcionadamente.
Dependiendo del ancho del dorso, la punta y las fosas nasales, con la ayuda de la rinoplastia se podría reducir o aumentar el tamaño de la nariz, según lo que más requiera el paciente, pero, también, de las posibilidades quirúrgicas y sin crearle problemas respiratorios.
Es prácticamente imposible lograr obtener una nariz completamente recta. En verdad, son pocas las personas que nacen con esa suerte. Sin embargo, en caso de tener una desviación del tabique nasal, siempre se puede solucionar a través de una rinoplastia para lograr su máxima simetría facial.
En el caso de las personas quienes tienen la punta de la nariz globulosa o mal definida, ello también tiene solución mediante una rinoplastia. Además, se trata de una intervención poco agresiva y cuya recuperación es sumamente rápida.
A nivel preoperatorio se le realizan al paciente una serie de exámenes y evaluaciones para asegurarse de que se encuentra en un buen estado de salud.
Este no es un proceso doloroso, ya que, como se sabe, la nariz no tiene movimiento ni articulaciones.
Si existe algún tipo de dolor se pueden ingerir varios tipos de antibióticos, antiinflamatorios y analgésicos para aliviarlo.